Qué es la inflación:


La inflación refleja la disminución del poder adquisitivo. Para medirla se tiene en cuenta los gastos básicos de un hogar comparándolos en diferentes periodos. La diferencia en porcentaje es la inflación. Por ejemplo: en periodo 1 comprar y pagar todo lo básico para un hogar cuesta 100. En periodo 2 lo mismo cuesta 110. Hay una inflación del 10%


Esto significa que si nosotros disponemos de 100 para cada periodo, en el periodo 2 ya vamos mal, deberemos dejar de comprar alguno de los artículos o servicios a los que estamos habituados. Nuestro dinero pierde valor de compra con la inflación.


Pero aparte de nuestra economía del día a día hay un tema al que debemos destinar especial atención: los ahorros.


Los ahorros podemos tenerlos invertidos o podemos tenerlos en una cuenta corriente. O en casa.
En periodos de inflación los ahorros que están en casa o en cuenta corriente pierden el valor equivalente a la inflación. Igual que hemos visto en el ejemplo.


Podemos plantearnos invertirlos en… ¿renta fija?
La renta fija es la que emiten empresas públicas y privadas, así como organismos oficiales como el estado o las comunidades, para obtener financiación para sus proyectos. Ofrecen a cambio garantías y algo de rentabilidad. Va destinada a ahorradores que quieren invertir el dinero en productos financieros sin riesgo.

En periodos de inflación como el actual, invertir en renta fija significa que si esta nos ofrece una rentabilidad del 1% por ejemplo y la inflación está en el 5% perdemos 4% de valor por nuestros ahorros en cada periodo.

Existen una serie de productos de renta fija ligados a la inflación. Invertir en ellos garantiza no perder poder adquisitivo, aunque tampoco ofrecen una rentabilidad mayor.


¿Cómo invertir en renta variable?
La renta variable no ofrece garantías, pero nos puede dar mucha más rentabilidad, ya que va ligada al crecimiento y al reparto de dividendos de la empresa en la que hemos invertido. Pero también podría dar rentabilidad negativa e igualmente perder valor nuestra inversión.
Está estudiado y comprobado históricamente que con el paso de los años las inversiones en fondos de renta variable a largo plazo, tradicionalmente han incrementado su valor. Son inversiones con crecimiento siempre que no tengamos prisa en recuperarlas, y las mantengamos por periodos iguales o superiores a los 10 años.


Algunos índices de renta variable como MSCI Word ofrecen la tranquilidad de estar invirtiendo en más de 1.600 valores de mediana y gran capitalización de sectores muy diversos, repartidos en 23 países, con una rentabilidad anual entre el 5% y el 6%.


¿Dónde invertir cuando hay inflación?
En momentos de inflación los ahorradores deben convertirse en inversores si no quieren perder valor adquisitivo. Las posibilidades son varias: inmuebles, oro, materias primas, etc. pero la más rentable a largo plazo siempre ha sido invertir en bolsa.


No olvidemos que con la renta variable siempre existe un riesgo, así que es necesario evaluar la aversión al riesgo de cada inversor antes de organizar la cartera. Es muy común combinar en una misma cartera renta fija y variable, en función del perfil de cada inversor.


En momentos de incertidumbre como el actual con una inflación más elevada que la habitual es cuando más necesario se hace dejarse aconsejar por un asesor financiero profesional que analiza objetivamente nuestra situación y da respuesta a nuestras necesidades.

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